El monumento en el monte txarlazo

En el monte Txarlazo, dentro de la sierra de Gorobel, existe un monumento en honor a la virgen de la antigua. Es bien conocido entre los montañeros y  los vecinos de la comarca, puesto que constituye un elemento más en el perfil de la propia sierra y es un mirador excepcional del valle de Orduña.
 

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Sin embargo, quizá no sea tan conocido que esta construcción, además de ser un elemento singular y curioso, fue una de las edificaciones de hormigón armado pioneras realizadas en toda España. Si bien el primer edificio construido en hormigón armado fue la Fábrica "la ceres" en Bilbao entre los años 1899 y 1900, el monumento del txarlazo fue inagurado en el año 1904, sólamente 4 años después.


El monumento representa la figura de la virgen de la antigua sobre una morera. Tiene en total unos 28 metros de altura y unos 15 de diámetro en la copa del árbol. El interior es accesible a través del "tronco" de 3 metros de diámetro mediante una escalera de caracol que llega al espacio interior de la copa, iluminado por pequeños huecos situados en sus paredes. Subiendo un nivel más, se puede acceder a un balcón exterior, justo debajo de la cara de la virgen y orientado hacia el desnivel de unos 600 metros hacia el valle. Bajo el pedestal y en su parte posterior existe una capilla, que tiene acceso independiente.

 



La obra fue promovida por una asociación de antiguos alumnos del colegio de la compañía de Jesús de Orduña y, aunque es propiedad de esta ciudad, se encuentra en terreno de Villalba de Losa (Burgos). 













La construcción fue ejecutada por la Casa Claudio Durán Ventosa y compañia de Barcelona, región dónde se había introducido el hormigón armado de la mano del Ingeniero Fraces Macia. Se emplearon 50 Toneladas de cemento y 20 de acero. Se cuenta que al ser una tecnología tan novedosa, los operarios catalanes, no dejaban acercarse a los lugareños mientras se realizaban las obras, para "mantener el secreto". Sin duda, fue una obra de difícil ejecución por la situación y las condiciones del lugar, que incluso necesitó de la mejora de alguno de los caminos de acceso. La lluvia, el frío y sobretodo los fuertes vientos son bastante habituales incluso en verano.

 



En los años posteriores se fundó una junta pro-monumento que se encargó de velar por su mantenimiento. Así se fueron realizando diversas reparaciones o mejoras de las infraestructuras: iluminación, caminos, urbanización,etc. Quizás de todas ellas, caben detacar las de los años 1945 (fecha de construcción de la capilla) y 1974 en la que se realizó una intervención integral del monumento ya muy de teriorado, pero que cambió sustancialmente su imagen. Los refuerzos hicieron que se deformara bastante la copa del árbol, cambiando sus proprciones y se perdieron bastante detalles de las ramas y el tronco.

1925                                                                                                                                  1975

Posteriormente la junta pro-monumento se extinguió, dejandolo casi abandonado a su suerte hasta hoy día. Ya ampliamente superado su centenario, se encuentra en unas condiciones bastante malas, con diversas y abundantes patologias: oxidación de armaduras,humedades, carbonatación...  




No está permitido el acceso a su interior por motivos de seguridad, aunque sí a la capilla de la parte inferior, que se abre en ocasiones puntuales.